Otras Cavilaciones

viernes, 28 de octubre de 2011

Imágenes efímeras…

            Hace unos años atrás, recuerdo un programa de TV (cuando aun miraba TV y bastante), en el cual le ofrecían a los participantes cirugías estéticas, a fin de llegar a parecerse a sus ídolos. Un programa a mi entender bastante negativo, lo mire no voy a mentir al respecto, incluso varios episodios y siempre me llamo la atención lo mismo, la necesidad de parecerse a alguien mas. Una suerte de querer encajar siendo físicamente alguien más.
            Idolatría o simplemente falta de amor propio, autoestima, en fin…como se le quiera llamar me pregunto ¿Qué empuja a una persona a desfigurar su propio rostro? ¿Para que sea como el de otra persona?. Parecerse a Elvis Presley, a Brad Pitt etc. ¿Qué te empuja a eso, que necesidad?
Recuerdo haber visto un programa un poco más sano, donde loqueaban a los participantes para filmar un video clip, donde se parecían a los artistas pero manteniendo su propia imagen, recuerdo a unos que imitaron al grupo Maná y les dieron la ropa y a uno le metieron extensiones de pelo. Pero no les cambiaron las facciones o el cuerpo
            Volviendo no me quedo claro en aquella época llegue incluso a pensar que era algo del furor de las cirugías, una moda, sin embargo, hace unos días leo por ahí que hay un filipino que se sometió a cirugías para “ser” superman. No me cierra será que no veo más allá de mis narices, no puedo entender que otro tenga la necesidad de ser igual a otra persona, físicamente es decir, ¿en el mundo de mañana serán todos o Brad o Angelina por decir algo y no habrá gente común? ¿Es malo ser común?
            Pienso en otras decisiones del cuerpo, ponerse o no un piercing, hacerse un tatto, el piercing quizás no tanto porque llegado al caso te lo podes sacar, pero el tatto que en definitiva es permanente, es marcar la piel de alguna forma, tiene por lo general una motivación o por lo menos eso espero de la gente, el mío lo tiene.
 Sin embargó, eso no cambia no va a variar con el tiempo corrección se puede arrugar eventualmente, pero yo ni siquiera necesariamente lo veo todos los días porque lo tengo en la espalda pero, el que se cambia la cara que ve en el espejo cada mañana, ya no es el sino otro, una cara famosa o por lo menos, más parecida a alguien mas que no es él o ella. ¿Será como el que tiene un tatto en un brazo?
            Lo que más me deja pensando es, ¿que pasa después? cuando la imagen de juventud y belleza empieza a hacer una imagen lejana efímera una imagen que desaparece con el tiempo, algo que no se puede conservar más que en una foto o una grabación que hacemos allí nos metemos en un tren de cirugía permanente hasta cuando y ¿después que?
            La juventud, la eterna gran quimera, en un mundo cada vez más visual ¿cual es la salida a tanta imagen efímera a tanto plástico y tanta superficialidad?, ¿formar parte del rebaño y buscar parecerse a alguien mas o asumir la consecuencia de la macha inexorable del tiempo? ¿ o será mejor dejarse de pensar y arrancar para el quirófano?

                                                                            Ro

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